Un simple sándwich de queso puede convertirse en un manjar si le añadimos unas láminas de trufa.
Ingredientes
- Rebanadas de pan de molde
- Unas lonchas de queso que funda bien
- Mantequilla
- Trufa
Elaboración
Precalentamos una sartén antiadherente y añadimos mantequilla. Cuando esté fundida colocamos las rebanadas de pan de molde hasta que se tuesten ligeramente y las sacamos.
Volvemos a añadir mantequilla y ponemos una rebanada por el lado que no está tostado, colocamos las lochas de queso y encima rallamos trufa y tapamos con la otra rebanada (el fuego no debe estar muy fuerte para que el queso se funda sin que se queme el pan. Vamos dando la vuelta hasta que se tuesten los dos lados del sándwich y se funda bien el queso.
Servir acompañado de una ensalada de brotes y de patatas fritas.
¡Una auténtica delicia!
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